lunes, 4 de julio de 2016

El conocimiento tradicional como sistema de clasificación de tierras

Producción en chinampas. San Gregorio Atlapulco. México.

Durante años colaboré con productores chinamperos del poblado de Xochimilco. El pueblo tiene importancia a nivel internacional debido al cultivo en chinampas, patrimonio intangible de la humanidad de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO). Pero, la mayor producción en sistema de chinampas proviene de los campesinos del pueblo de San Gregorio Atlapulco que se dedican a la producción de hortalizas. Ellos heredaron de sus antepasados los secretos de la tierra y el mejoramiento de sus propiedades físicas, químicas y biológicas con base en sus propias características.

Durante el tiempo que recorrí la zona lacustre y los pueblos aledaños, los campesinos me enseñaron las formas y técnicas empleadas en la chinampería; a hacer almácigos, dragar lodo para fertilizar el suelo y a reconocer los grados de deterioro salino (ensalitramiento) de cada parcela. Este conjunto de técnicas son resultado de cientos de años de experimentación, lo que los llevó a desarrollar un profundo conocimiento de la técnica de construcción de las chinampas y del mantenimiento de las mismas.

Así como los pobladores de Xochimilco y San Gregorio Atlapulco, los campesinos y productores de todo el mundo heredaron de sus antepasados los conocimientos necesarios para el cuidado y el aprovechamiento sustentable del suelo. Han experimentado de manera directa para mejorar os rendimientos de sus parcelas, milpas o tierras y disminuir el riesgo de pérdida.

De esta manera, desde antes de la revolución del neolítico los seres humanos observaron con gran interés a la naturaleza y pusieron atención en el crecimiento de las plantas. En el neolítico aprendieron a plantar semillas, regarlas, abonarlas y controlar sy crecimiento y producción, Para ser exitoso el ser humano, tuvo necesidad de conocer el suelo en el que producía sus alimentos, entender sus propiedades y la relación que guardan las diferentes clases de suelos con los cultivos.

Suelo productivo con problemas de salinidad.

El conocimiento del suelo se volvió mas detallado con el tiempo, diferenciándolo en clases y asociándolos a diferentes tipos de usos (agrícola, ganadero y forestal). Entonces, no es extraño que se les identificara como bueno o malo, según su utilidad y manejo. Con el tiempo, el conocimiento empírico de los suelos se fue enriqueciendo hasta constituir un importante valor socio cultural y económico para cada comunidad.

Suelo calizo y vegetación de matorral xerófilo. Zapotitlán de las Salinas. Puebla.
Suelo Vertisol, muy arcilloso en selva baja caducifolia. Izúcar de Matamoros. Morelos.

Indígenas y campesinos en México y otras partes del mundo dan a los diferentes suelos denominaciones en su lengua materna o en términos locales o regionales, y tienen conocimientos asociados a ellos.

La etnoedafología estudia estos conocimientos que los productores poseen sobre el recurso suelo. Entre los principales criterios de clasificación de suelo están color, textura, contenido de materia orgánica, drenaje, salinidad, profundidad, pedregosidad, topografía, tipo de suelo, capacidad productiva, ambiente, erosión, manejo y fertilidad. Estos factores se han estudiado en varias comunidades e idiomas como el maya yucateco, maya tsoltzil, náhuatl, purépecha y otomí.

También existen otras expresiones en las que intervienen otros indicadores, por ejempleo en maya yucateco tsekel denota a una tierra muy pedregosa, tierra mala para sembrar; yaaxhom, tierra fértil, sitio siempre verde, hondonada rodeada de lomas; tok, sabana, sitio quemado anualmente, terreno plano inundable temporalmente; akalché, tierras pantanosas e inundables en los bajos; kacab, lugar en donde hay ruinas mayas, tierra buena para el maíz, tabaco, algodón y legumbres. En maya tsotzil sakxik lum, suelo gris, es formado con la mezcla de residuos orgánicos, y en purépecha echeri terenda, suelo de pudrición, es usado para abono de los solares y forestales; echeri atzimu significa suelo inundado.

A continuación se enlista una serie de denominaciones de suelos respecto a su textura y color.

Fuente: Pool Novelo et al., 2015
En la actualidad entender y utilizar los saberes de las poblaciones rurales respecto a los suelos, ha mostrado un impacto positivo en el desarrollo de tecnologías para su manejo y fertilidad. Esto aplica todavía más si se incluye a la población local en la incorporación y adaptación de nuevas tecnologías de producción de alimentos así como en su validación.

Así mismo, resulta fundamental rescatar y registrar estos conocimientos con apoyo de los productores indígenas de México,con quienes se requiere establecer comunicación en sus lenguas maternas. Es ineludible que este conocimiento basado en una filosofía de coadyuvar con la naturaleza de manera armoniosa, contribuirá con las investigaciones científicas para aprovechar los recursos naturales de una mejor manera.


Referencias

Rojas Rabielas, T. 1993. La agricultura chinampera. Universidad Autónoma Chapingo, Chapingo. 363 p.
Ortiz Solorio, C. A. y Ma. del C. Gutiérrez Castorena. 1999. Evaluación taxonómica de sistemas locales de clasificación de tierras. Terra 17(4): 277-284.
Pool Novelo, L., D. J. Álvarez Solís y J. Mendoza Vega. 2015. Dime como te llamas y te diré qué suelo eres. Ecofronteras 19(55): 6-9.

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