miércoles, 3 de enero de 2018

El Museo de Tepexpan

El Museo de Tepexpan en el noreste del Valle de México es muy chiquito literalmente, pues solo cuenta con dos salas de exhibición y puede pasar desapercibido. Pero vale la pena visitarlo pues muestra el esqueleto humano que en un principio se pensó eran los restos óseos más antiguos de América, así como mandíbulas, costillas y vértebras de megafauna existentes en este sitios antes de la última glaciación, hace más de 10 000 años.


En la primer sala encontramos información referente a las tres vías de ingreso propuestas al continente americano [1) Migración de Oceanía llegando a América del Sur, 2) Procedencia de Europa bordeando las masas glaciares, hasta llegar al noroeste de América, 3) Partiendo del noroeste de Asia pasando por el Estrecho de Bering para llegar al noroeste de América.] y evidencia de existencia de megafauna existentes en este lugar (mamut).

Vías de ingreso al Continente Americano.
Costillas y vértebras de mamut.
Vértebras de mamut.
Molar de mamut.
Molar de mamut.
El esqueleto del hombre de Tepexpan fue descubierto en 1947 por Helmut de Terra. Este descubrimiento fue muy importante en México porque impulso el estudio de la prehistoria en México. Estudios de la forma del cráneo sugieren una edad para el esqueleto del Holoceno Temprano (9 000 – 7 000), pero resultados obtenidos por medio de serie de uranio dieron una edad de 4 700 ± 200 años antes del Presente (Holoceno medio).

Esqueleto del Hombre de Tepexpan.
En la segunda sala, además del sitio donde se encontró el Hombre de Tepexpan y su estratigrafía, podemos observar el estudio de los sedimentos, flora y fauna en la cuenca de México, artefactos asociados a restos óseos de animales, métodos de datación y la primera reproducción del Hombre de Tepexpan.
Primera reproducción del Hombre de Tepexpan

Fauna en la Cuenca de México durante el Pleistoceno

Fragmento de pata de mamut.

Estratigrafía de sedimentos como uno de los métodos de datación.
Espero puedas darte una vuelta a este museo, pues además de ser un pretexto para salir a dar la vuelta, es completamente gratis como muchos otros museos. Está abierto al público de martes a domingo de 10:00 a 16:50 horas.

Museo Prehistórico de Tepexpan 
Secretaría de Cultura/INAH
Carr. México-Teotihuacán Km. 32
Col. Anáhuac CP 55855 Tepexpan, Acolman, Estado de México

martes, 2 de enero de 2018

Papantla, pueblo mágico que te invita a volar

Lo más bello que he podido hacer en esta vida es poder viajar y conocer una variedad de lugares y personas. Entre ellos se encuentra la ciudad de Papantla, en el estado de Veracruz. Este lugar me ha brindado armonía, tranquilidad y la inquietud de poder volar.

A principios de Febrero, me dirigí con mi familia a esta ciudad. Fuimos guiados por comentarios, que indicaban que era la ciudad de la vainilla, lo que fue cierto.

Al llegar al centro de la ciudad pudimos contemplar la escultura de un par de jóvenes que representan los personajes de la leyenda de la vainilla.

Tzacopontziza y Zkatan-Oxga, príncipes totonacas.

Parte de la leyenda es lo siguiente:

“...en tiempos del rey Teniztle tercero de la dinastía totonaca,
 una de sus esposas dio a luz a una niña a quien pusieron por nombre Tzacopontziza (lucero del alba) que por su singular hermosura fue consagrada al culto de la diosa Tonacayohua cuidadora de la siembra, el pan y los alimentos …
un día el príncipe llamado Zkatan-Oxga (joven venado) … la raptó, huyendo con ella a la montaña, en su camino encontraron un monstruo que los obligo a retroceder hasta donde estaban los sacerdotes … ambos jóvenes fueron degollados y sus corazones ofrecidos a la diosa. 
A partir de su sangre brotó un arbusto de espeso follaje, del cual nació una orquídea … perfumando el ambiente con su aroma.”
José de Jesús Núñez y Domínguez

Siguiendo en el centro de la ciudad encontramos el mural llamado "Homenaje de la cultura Totonaca"

Mural "Homenaje de la cultura Totonaca".

En el mural podemos observar una representación del inicio del hombre sedentario y el origen de la agricultura, la belleza y el esplendor del Tajín, así como la representación del ritual empleado para solicitar lluvia a los dioses, efectuado por un grupo de hombres llamados "Voladores de Papantla".


Siguiendo nuestro recorrido encontramos el mercado viejo Juarez, un lugar bello, lleno de vida: nos ofrece plantas comestibles, variedad de chiles y flores.

Mural de la entrada del mercado Juarez.

Guaje (Leucaena edulis (Moc. & Sessé ex DC) Benth.), chiltepin seco y verde (Capsicum annuum var. glabriusculum (Dunal) Heiser & Pickersgill), ajonjoli (Sesamum indicum L.) molido con chiltepin.

Señora vendiendo semilla para hacer enchiladas de pipian. Utiliza las latas de sardina o de algunos vegetales para medir las cantidades a vender.

Vendedora de plantas comestibles en el mercado Juarez (nopal (Opuntia ficus-indica (L.) Mill.), chayote (Sechium edule (Jacq.) Sw.), jengibre (Zingiber officinale Roscoe)).
Tomatillo silvestre, mandarinas, nopales y rabanos.

Diferentes variedades de chiles, utilizados en la elaboración de mole. Habas (Vicia faba L.), lenteja (Lens culinaris Medik.), alberjon , frijol (Phaseolus vulgaris L.) seco, pulpa de tamarindo (Tamarindus indica L.) y ajos (Allium sativum L.), 

El mercado nuevo Miguel Hidalgo ofrece una vista distinta, en él podemos encontrar artesanías: juguetes de madera, artículos hechos a partir de la vainilla.

Recuerditos que puedes obsequiar a familiares y amigos.

Vendedora de juguetes y bordados.

Alrededor de la plaza principal, podemos observar a personas que utilizan su vestimenta de calzón.

Cualquier día es excelente para platicar con los amigos.

Incluso podemos alimentar a las pequeñas ardillas que juguetean por el lugar.

Alimentando una pequeña ardilla (Sciurus vulgaris).
Cerca de la ciudad de Papantla, se puede disfrutar de algunos temazcales, sin embargo el tiempo no me ha alcanzado para poder limpiar mi ser.
Una imagen que traigo conmigo, es la de un Volador de Papantla, que aunque no me dio su nombre, refleja, el gusto de portar su vistoso traje y aun conservar sus tradiciones, un autentico totonaca.

Volador de Papantla
Hasta aquí llega mi viaje por la ciudad de la vainilla, aquí dejo parte de mi corazón y espero pronto volver y disfrutar la magia de sentir que vuelo.