Mostrando las entradas con la etiqueta Agroecología. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Agroecología. Mostrar todas las entradas

jueves, 11 de agosto de 2016

Una nueva Maestría en Agroecología en el Colegio de Postgraduados

Un grupo de profesores en mi institución, el Colegio de Postgraduados, ha trabajado desde hace tiempo en una propuesta para un posgrado en Agroecología. Nos acaba de llegar la buena noticia que primero la institución y luego CONACyT lo aprobaron como un "Posgrado en Desarrollo", o sea, habrá apoyo con becas.


Es una Maestría en Agroecología y Sustentabilidad. Los cursos iniciarán en enero de 2017; para ingresar para esta fecha hay que someter papeles en septiembre de 2016. Pueden encontrar más información en la página web del posgrado. Se impartirá en el campus Montecillo en Texcoco, Estado de México.

lunes, 8 de agosto de 2016

Presentación del video "La dieta mesoamericana: orígenes"

Les prometí que les iba a avisar si se proyecta el video nuevo sobre los origenes de la dieta mesoamericana. Y ahora sí hay una oportunidad, y lo que es más, gratuita.

Se presentará el video mañana, 9 de agosto de 2016, dentro del ciclo de seminarios del Instituto de Biología de la UNAM. La cita es a las 11 en el Auditorio del Jardín Botánico de la UNAM (el auditorio se encuentra dentro del edificio anexo al Jardín Botánico; no hay que meterse al Jardín, sino está a un lado del estacionamiento). Dos de los autores estarán enlazados vía Skype para preguntas.



Aquí va la sinopsis:

​¿​ Cómo era la comida Mexicana antes de que México existiera? ¿Antes del nacimiento de las grandes culturas prehispánicas Mesoamericanas, qué se traía a la mesa?

Entre 10,600 y 4,400 años antes del presente es cuando el núcleo de la dieta Mesoamericana pudo haberse creado. Esto es lo que señala la evidencia descubierta por los biólogos Daniel Zizumbo, Patricia Colunga, y Alondra Flores en el Centro-Occidente de México: ¡Una época previa al desarrollo de la cerámica, e incluso antes de la domesticación de las especies fundamentales para la agricultura tradicional! Con esta evidencia, los científicos argumentan que esta dieta arcaica pudo ser, en sí misma, un incentivo para domesticar al maíz, la calabaza, los frijoles y los chiles, y para desarrollar la increíble milpa.

Con esta base, e integrando muchas otras especies nativas y del resto del continente, las culturas Mesoamericanas desarrollaron múltiples gastronomías regionales tradicionales que son diversas, nutritivas, y balanceadas. Su revalorización, rescate y recreación son acciones básicas para enfrentar los problemas de diabetes, obesidad y pérdida de diversidad biocultural que aquejan a la región.

Corto: https://vimeo.com/125834295

Y aquí la anterior reseña en Cuexcomate, con referencias bibliográficas:


jueves, 28 de julio de 2016

La Revista Mexicana de Agroecosistemas

A varios de ustedes quizas les interesa conocer la Revista Mexicana de Agroecosistemas, que se encuentra en su tercer año. Es publicado por el Instituto Tecnológico del Valle de Oaxaca en forma semestral.

Dicen las instrucciones para autores: "La Revista Mexicana de Agroecosistemas es un órgano de difusión del Instituto Tecnológico del Valle de Oaxaca, donde estudiantes y profesionales de las ciencias agropecuaria, forestal, biológica y social, preferentemente podrán publicar resultados de sus trabajos de investigación. La temática de la RMAE está conformada por cuatro áreas: a) Agroecología, b) Estudio, diseño y manejo de sistemas de producción, c) Agroecosistemas y sociedad y d) Recursos naturales."

Me parece muy alentador este esfuerzo por parte de una institución que está jugando un papel cada vez más importante en la enseñanza del ámbito biológico-agropecuario.

Para darles una idea de los temas tratados, aquí van los títulos de los últimos dos números, 3-1 y 2-2:

  • Efecto de la temperatura en el comportamiento postcosecha de tomate de cáscara (Physalis ixocarpa Brot.) var. Rendidora
  • Evaluación de la tolerancia de genotipos de banano A Sigatoka Negra (Mycosphaerella fijiensis Morelet) en el Soconusco, Chiapas, México
  • Efecto antagonista de Hyphomycetes endófitas de Taxus globosa Schltdl. contra Fusarium spp. y Alternaria spp., patógenos de Capsicum annuum
  • Interacción genotipo-ambiente en poblaciones de maíz nativo de Chiapas
  • Sustentabilidad de tres sistemas de producción ovina en los valles centrales de Oaxaca

  • Potencial germinativo de Lysiloma acapulcense (Kunth) Bent, una especie de la selva baja caducifolia de la Mixteca Oaxaqueña
  • Análisis de la alfalfa comercializada en Zaachila, Oaxaca, y su relación con el rendimiento y la calidad
  • Conocimiento tradicional y valor cultural de Sphenarium spp. en Valles Centrales de Oaxaca (son los chapulines comestibles)
  • Invluencia de variables fisiográficas en la productividad de biomasa aérea en bosques mixtos
  • Eficiencia biológica de Pleurotus sp. nativo de Oaxaca (ITAO-27) sobre rastrojos de frijol, maíz y olote
  • Análisis sensorial y bromatológico de la acamaya (Macrobrachium carcinus) (es un crustáceo)

miércoles, 20 de julio de 2016

Feria agroecológica en Guelatao de Juárez, Oaxaca


En las pasadas vacaciones de semana santa, fui a visitar el pueblo que vio nacer a uno de los presidentes de nuestro país. Este pueblo es Guelatao de Juárez en Oaxaca.


Cada 21 de Marzo, como es costumbre, se organizan diversas actividades deportivo-culturales en el pueblo en conmemoración al nacimiento del Benemérito de las Américas.


En esta ocasión la Secretaría de Desarrollo Social y Humano así como el Módulo de Desarrollo Sustentable en conjunto con la autoridad municipal de Guelatao organizaron una feria agroecológica que se llevó a cabo los días sábado, domingo y lunes (19 al 21 de marzo) con motivo del CCX aniversario del natalicio de Don Benito Juárez.

A continuación les comparto algunas fotos de este evento:

Productor de mezcal

Jicaritas para tomar mezcal hechas del fruto de Crescentia

Varios productores de la región y de la capital del Estado, se dieron cita y mostraron gustosos sus productos a todos los visitantes.

Dentro de lo que pudimos encontrar estuvieron:

Nieves

Mezcal

Miel y sus derivados

Ropa típica bordada a mano
Productos de uso cosmético a base de plantas



Exfoliante de café

La región de la Sierra Juárez como ya hemos comentado antes, posee una amplia gama de ecosistemas. Las partes frías y calientes hacen posible la obtención de diversas frutas de las cuales se pueden elaborar algunos otros productos, como los dulces que elabora Doña Adela, habitante de Guelatao.
Calabaza, nueces, jamaica, panela, pay de queso y de manzana, pulpa de tamarindo, etc.


Tepejilote en almíbar

Cacao y mermeladas de piña y membrillo


Dulces de tejocote


También se podían observar algunas obras con bejucos y palmas



 y no podía faltar el café...


 Las flores


y más mezcal...


Maguey y cremas de mezcal
Pero también hubo comida: las típicas tlayudas, empanadas de amarillo y flor de calabaza, memelitas acompañadas de agua fresca de frutas o café de olla, etc.

Local de Dona Panchita a orillas de la laguna
Memelitas
 Por último, una foto de la laguna de Guelatao


Es la primera vez que puedo asistir a una de estas ferias y me gustó mucho por la importancia que se le está dando últimamente a lo elaborado localmente y a partir de insumos naturales, por lo que espero que al igual que yo, disfruten de las fotos...

Para quienes estén interesados en asistir el próximo año les dejo la página de facebook de ecoturimo en Guelatao donde pueden encontrar más información:

Turismo Alternativo Yela - too

martes, 19 de julio de 2016

Agroecología y plantas medicinales en Latinoamérica

Hoy les quiero anunciar dos eventos.

El primero organiza el Departamento de Agroecología de la Universidad Autónoma Chapingo. Se trata del "II Encuentro Internacional Economía Campesina y Agroecología en América: Soberanía alimentaria, cambio climático y tecnologías agroecológicas".

Se llevará a cabo del 11 al 13 de Agosto de 2016 en las instalaciones de la UACh (Auditorio Álvaro Carrillo). Cuenta con conferencistas muy destacados, y tiene un costo (parece que lo aumentaron a 650 pesos por razones que se explican en la página Facebook del Departamento); se tiene que pagar hasta el 22 de julio de 2016.






El segundo evento es el IV Congreso Latinoamericano de Plantas Medicinales, que está previsto para el 17-19 de agosto de 2016, en la Unviersidad del Norte, Barranquilla, Colombia. Desafortunadamente ya pasó la fecha límite para contribuciones (30 de junio), pero supongo que todavía se puede asistir. Hay un curso precongreso sobre "Cromatografía y Espectrometría de Masas en el Análisis de Productos Naturales".


miércoles, 12 de agosto de 2015

Congreso SOMAS 2015

La Sociedad Mexicana de Agricultura Sostenible invita a su congreso 2015 del 23 al 28 de noviembre en la ciudad de Aguascalientes. Incluye varios cursos y simposios sobre temas específicos, así como concursos (de tesis, de presentaciones y de artes plásticas) y recorridos de campo.

La fecha límite para someter resúmenes se extendió al 15 de agosto, o sea, es el próximo sábado. Así que apurense si quieren participar.


lunes, 13 de julio de 2015

Milli

Figura 1. Arreglo espacial de los cacahuatales en El Puente (ver abajo); hileras de maíz separan los cultivos de cacahuate

La primera vez que escuche la palabra milpa la asocie con el exterior a mi casa, después con el trabajo en el campo. Posteriormente la asocié rápidamente con la planta de maíz; aun cuando en la milpa crecían muchas especies que usábamos para comer, seguí asociando la milpa exclusivamente con el maíz. Quizá sea por que a simple vista se ve maíz.

Con el paso de los años, conocí otros pueblos donde también decían milpa pero al conocer directamente esas milpas, no correspondían con lo aprendido a mi entorno local. En esos otros pueblos de México la milpa tomaba diversos matices pero tenían algo en común, eran cultivos, la mayoría de las veces asociados al cultivo de maíz. Pero en algunos casos el maíz estaba ausente y aun así, la gente seguía denominando milpa a esos cultivos.

Decían aquellas otras gentes de los diferentes pueblos de México: milli (sementera o milpa), milpa (en la sementera o en el terreno con cultivos), chilmilli (milpa de chile), kakawamilli (milpa de cacahuate), emilli (milpa de frijol), etc.

Será acaso que el término “milli” en un principio se aplicó al cultivo de maíz y a los cultivos asociados y conforme evoluciono la agricultura y la domesticación de otros cultivos fue adquiriendo la connotación de policultivo y no necesariamente con presencia de maíz.

En la Huasteca Veracruzana las milpas tienen sus propias características. Nos enfocaremos a la comunidad náhuatl de El Puente del municipio de Zontecomatlán de López y Fuentes. La elevación de la comunidad de El Puente es de 500 msnm y es representativa de la parte baja de la cuenca del río Xilotla, situándose en el área de barlovento. El estudio de caso fue en la parcela "La Mesa" que presentó un policultivo.


El agroecosistema policultivo en El Puente

El agroecosistema tiene una superficie de ocho hectáreas y está conformado por cacahuatal, maizal*, frijolar, acahual y vegetación primaria. Los cultivos tienen una rotación en tiempo y espacio pues se dispone de 6.5 ha para este fin. La extensión de los cultivos es variable, en cambio la vegetación se mantiene constante por tener especies útiles, que son escasos en otros lugares (1.5 ha).

*En el estudio de caso de la caracterización del agroecosistema de la comunidad de El Puente, se trata de una variante de la rotación cacahuatal-milpa-frijolar-acahual en donde la milpa es sustituida por el monocultivo de maíz dentro del mosaico de cultivos.

La pendiente de la superficie destinada a los cultivos es en promedio de 20%, ya que se ubica en la parte alta del agroecosistema. El suelo presenta una profundidad aproximada de 20 cm, es de color café con textura arcillo-arenosa. Al momento del estudio se encontraban cenizas en abundancia de la quema del estrato arbóreo-arbustivo del año anterior. La erosión es de tipo laminar y el suelo presenta 10% de pedregosidad.


Rotación y sucesión de cultivos

A continuación se describe la sucesión de los cultivos . Para el caso del maíz es la siguiente: maíz de temporal (xopamilli), maíz de tonalmil (tonalmilli), frijol de temporal y finalmente el descanso del espacio que es conocido como milcahual (milkahualli). Para el espacio destinado al cacahuate, la sucesión es la siguiente: cacahuate de temporal, frijol de tonalmil, maíz de temporal y milcahual. En el caso del frijol que aun no se había establecido, la sucesión es la que sigue: frijol de temporal, cacahuate de temporal y milcahual. En el ciclo agrícola de tonalmil (de invierno), sólo se siembra maíz-frijol, en una superficie menor a la destinada durante la época de lluvias, debido a la disminución de la humedad. De esta manera, se tiene una cosecha diversificada por ciclo agrícola (Cuadro 1).

Cuadro 1. Rotación y sucesión de cultivos, policultivo La Mesa, El Puente.




La superficie destinada a los cultivos es de 1.5 ha aproximadamente, dentro de los cuales el maíz ocupa una hectárea y el frijol y el cacahuate en conjunto 0.5 ha. Esto permite que cinco hectáreas del terreno estén en descanso para recuperar la fertilidad. Cuando la sucesión de los cultivos termina con el milcahual, la nueva superficie destinada a los cultivos es rozada y quemada, aportando minerales al suelo para el siguiente ciclo agrícola.


Características generales de los cultivos

Además de los cultivos antes mencionados, se reportan ajonjolí, sandia y piña en menor proporción que se encuentran asociados al cultivo del cacahuate principalmente.

Las características de todos los cultivos estuvieron influenciadas principalmente por la escasez de agua, ya que se presentaron sólo tres lluvias esporádicas en todo el mes de agosto de 2009. A continuación, se detallan los aspectos más relevantes encontrados en dichos cultivos.


Características de los cultivos individuales

Cultivo: Cacahuate (kakahuatl)*. Estado general (coloración): Verde claro. Incidencia de plagas y/o enfermedades: Defoliaciones por causa de hormigas arrilleras (tzikame) y marchites por nextekuilli (Phyllophaga spp.). No se presentan problemas severos. Altura de plantas: 30 cm en promedio. Usos: El grano se vende tostado y en menor medida se consume.

Cultivo: Maíz blanco ancho (zintli). Estado general (coloración): Verde claro con algunas decoloraciones. Incidencia de plagas y/o enfermedades: Se reporta nextekuilli (Phyllophaga spp.) y gusano cogollero al mes de la siembra. Altura de plantas: 2.10 m en promedio. Usos: Autoconsumo (elotes, tortillas, atoles, etc.).

Cultivo: Ajonjolí. Estado general (coloración): Verde claro. Incidencia de plagas y/o enfermedades: Sin presencia de plagas. Altura de plantas: 80 cm aprox. Usos: Condimento en la elaboración de platillos, para el Día de Muertos.

Cultivo: Sandía. Estado general (coloración): Clorótico con signos de estrés hídrico. Incidencia de plagas y/o enfermedades: Sin presencia de plagas, aunque susceptible a sequías. Altura de plantas: 13 cm aprox. Usos: Autoconsumo.

Cultivo: Piña (matzohtli). Estado general (coloración): Clorótico con signos de deficiencia de nutrimentos. Incidencia de plagas y/o enfermedades: Sin presencia, aunque se reportan problemas con algunos pájaros en la época de fructificación. Altura de plantas: 25 cm en promedio. Usos: Autoconsumo.

Cultivo: Frijol negro (etl). Incidencia de plagas y/o enfermedades: Se reporta Phyllophaga spp., aunque al momento del estudio, aun no se había establecido el cultivo. Usos: Venta y autoconsumo.


*En las comunidades nahuas de la cuenca del río Zontecomatlán, se conoce al cacahuate con el nombre de tlalkakahuatl.

Cabe mencionar que los cultivos, a pesar de tener un arreglo espacial en forma de mosaico (cacahuate, maíz y frijol), se encuentran asociados en diversos grados, pues dentro del espacio destinado al cultivo de cacahuate se encuentran hileras de maíz, que dividen al cacahuatal en cuatro partes; el ajonjolí se encuentra en las orillas del cultivo y la piña se encuentra dentro. Estas características son peculiares de la región (ver Figura 1 al inicio).


Manejo de los cultivos en el policultivo

El manejo de los cultivos es característico de la región ya que integra la asociación y rotación desde tiempos inmemoriales, y recientemente el uso de insumos como herbicidas.

El manejo del cultivo de cacahuate (Arachis hypogaea)

Las labores culturales que presenta el cacahuate en policultivo son: Preparación del terreno, siembra, deshierbes, plagas y enfermedades, cosecha, transporte, tostado o ahumado, almacenaje y comercialización.

Preparción del terreno: El número de jornales por ciclo agricola es de cuatro (1 familia y 3 alquilados). Se prepara en mayo; después de dos años de descanso, el terreno se roza, tumba y quema.

Siembra: El número de jornales por ciclo agricola es de tres (1 familia y 2 alquilados). Se siembra alrededor del 25 de junio a una distancia que oscila entre los 35 y 40 cm entre hileras y entre matas. Los hoyos se hacen con bastón plantador (kuahuitzohtli), depositando dos semillas en cada hoyo.

Deshierbes: El número de jornales por ciclo agricola es de cuatro (2 familia y 2 alquilados). Se deshierba de julio a agosto; se hace con huingaro (un instrumento parecido a la hoz) a los 30 días de haberse sembrado el cacahuate. Posteriormente se lleva a cabo el segundo, a los 15 días de haberse hecho el primero.

Plagas y enfermedades: No se hace nada. Se observó la presencia de gallina ciega o nextekuilli (Phyllophaga spp.) que se come las raíces. La hormiga arriera (tzikatl) troza las hojas de las plantas. Durante la cosecha se tiene problemas con los ratones, armadillo, tejón, zorrillo y zorra (oztotl). Los pájaros son ahuyentados con camisas a modo de espanta pájaros y cintas de videocasetes (zumbido con el viento).

Cosecha: El número de jornales por ciclo agricola es de 15 (5 familia y 10 alquilados). Se hace en noviembre; la cosecha tiene una duración de cinco días. Por cada día se ocupan tres peones. La planta de cacahuate es arrancada, con la ayuda de una barreta y puesta con las vainas hacia arriba para dejar que se seque. Se forman hileras o montones, para orearlas durante tres días.

Transporte: El número de jornales por ciclo agricola es de cuatro (1 familia y 3 alquilados). Se hace en noviembre; posteriormente se desprenden las vainas y son llevadas con costales, hasta el lugar donde serán tostadas.

Tostado o ahumado: El número de jornales por ciclo agricola es de uno (1 familia y 0 alquilados). Se hace en noviembre; se tuestan en el kupilli (ahumador), el cual es utilizado para ahumar chile. Sus proporciones son 1.5 m de largo, 1.2 m de ancho y 1 m de alto. Las vainas del cacahuate son puestas sobre el kupil, alcanzando un grosor de 20 cm aproximadamente y son movidas cada 15 o 20 minutos dependiendo de la intensidad de la lumbre. Se procura que las vainas que se encuentren en las orillas y en la parte superior queden en el centro para un tostado uniforme. Durante el tostado transcurren tres horas aproximadamente. Se utilizan dos tercios de leña para ahumar 40 cuartillos.

Almacenaje: El número de jornales por ciclo agricola es de uno (1 familia y 0 alquilados). Se hace en noviembre; se almacena en bultos de 30 cuartillos.

Comercialización: El número de jornales por ciclo agricola es de uno (1 familia y 0 alquilados). Se hace despues de noviembre; la comercialización se lleva a cabo en la cabecera municipal de Benito Juárez. Es vendido al menudeo por cuartillo o al mayoreo, por lo regular a coyotes (intermediarios).

La variedad de cacahuate encontrada fue de crecimiento erecto, ciclo de cultivo corto (90 días), grano pequeño, de 3 a 4 granos por vaina. Se esperaba una cosecha de 120 cuartillos de cacahuate. El costo del cuartillo* era de $ 25.00 pesos en el año 2009.

*Las unidades de medida utilizadas para la venta son el litro y el cuartillo, y se basan en volumen (un cuartillo corresponde a 5 litros). El cuartillo es una unidad de medida arraigada entre población de estirpe mesoamericano (Casales et al., 2010).

El número de jornales requerido durante todo el ciclo agrícola de primavera-verano hasta la comercialización es de 13 para el caso de la mano de obra familiar y de 20 para la mano de obra alquilada. Da un total de 33 jornales sólo para el cultivo del cacahuate.


Manejo del cultivo de maíz

Las labores culturales en el manejo del cultivo de maíz son: preparación del terreno, siembra, deshierbes (aplicación de herbicidas), plagas y enfermedades, resguardo de animales del monte alto, cosecha, transporte y almacenaje.

Preparación del terreno: El número de jornales por ciclo agricola es de cuatro (1 familia y 3 alquilados). Se hace en mayo; después de dos años de descanso, el terreno se roza, tumba y quema.

Siembra: El número de jornales por ciclo agricola es de tres (1 familia y 2 alquilados). Se hace desde principios de junio a principios de julio; se siembra con bastón plantador (kuahuitzohtli), depositando de tres a cuatro semillas en cada hoyo. La distancia entre plantas e hileras es de un metro aproximadamente.

Deshierbes (aplicación de herbicidas): El número de jornales por ciclo agricola es de 32 (4 familia y 28 alquilados). Se hace de julio a agosto. La mayoría de los campesinos usan herbicidas, pero depende del campesino, pues algunas personas prefieren no utilizarlos, debido a que aprovechan arvenses comestibles como el papalokilitl y quelites, que de otra forma se perderían. También han notado que el esterón se volatiliza afectando a cultivos vecinos de hoja ancha.

El control de las hierbas se hace con la aplicación de gramoxone (paraquat) y fitomina revueltos. Se ocupan 4 litros de gramoxone y 4 litros de fitomina. La dosis utilizada es de 40 mL/ 15 L de agua, en un proporción de cada herbicida de 1:1. La aplicación de estos herbicidas se hace cuatro veces, durante todo el ciclo biológico del cultivo, ocupándose 450 mochilas de 20 L aproximadamente. El agua que se utiliza, se acarrea de los arroyos.

Plagas y enfermedades: No se hace nada. Hay presencia del gusano cogollero (Spodoptera) al mes de haberse sembrado. La gallina ciega (Phyllophaga spp.) se come las raíces. Estas plagas, la mayoría de las veces, sólo afectan pocas matas.

Resguardo de animales del monte alto: El número de jornales por ciclo agricola es de uno (1 familia y 0 alquilados). Se hace en septiembre; durante el mes de septiembre existen problemas con los tejones y jabalís, pues bajan del monte alto en busca de elotes, afectando en gran medida al maíz. Para el resguardo de los elotes, se cuida la milpa de noche, que es cuando bajan los animales. Algunas veces las personas aprovechan para cazar algunos ejemplares y de esta forma ahuyentar a las manadas de estos animales.

Cosecha: El número de jornales por ciclo agricola es de 14 (2 familia y 12 alquilados). Se hace en noviembre; la cosecha se lleva a cabo durante dos días. Se corta la mazorca con hoja y se apila en la troje (zinxakalli), que se ubica en la parcela.

Transporte: El número de jornales por ciclo agricola es de uno (1 familia y 0 alquilados). Se hace en noviembre; posteriormente, de acuerdo a las necesidades de la familia la mazorca es llevada poco a poco. En algunos casos es transportada directamente hasta la casa del propietario.

Almacenaje: El número de jornales por ciclo agricola es de uno (1 familia y 0 alquilados). De noviembre a septiembre se construye en el terreno una troje con la madera de árboles de jonote (Heliocarpus) para almacenar el maíz. La altura del piso de la troje es de medio metro aproximadamente. Si es transportado al hogar, se apila en un rincón y es deshojado y desgranado gradualmente.


En cuanto a la mano de obra requerida para el cultivo de maíz, desde el establecimiento hasta el almacenaje en el ciclo agrícola de primavera-verano, es de 11 jornales para el caso de la mano de obra familiar y 45 jornales para el caso de mano de obra alquilada. Da un total de 56 jornales utilizados.

Considerando los cultivos de cacahuate y maíz, se requiere un total de 24 jornales provenientes de la familia y 65 jornales alquilados para las diversas labores culturales que requieren estos dos cultivos. Son un total para los dos cultivos de 89 jornales en el ciclo primavera-verano.


Interacciones entre cultivos del agroecosistema

De acuerdo con el campesino, la importancia de los cultivos de cacahuate y maíz es la misma; pues del primero se obtienen ingresos en la economía familiar y del segundo alimento, que permite la permanencia de la familia. Por lo tanto guardan una relación estrecha entre si, en espacio y tiempo dentro de la parcela.

La relación que guardan los cultivos durante los ciclos agrícolas, son para equilibrar la demanda de nutrimentos y la disponibilidad de los mismos. Para el caso del maíz se destina el mismo espacio durante dos ciclos agrícolas, agotando el suelo, que posteriormente es compensada con el establecimiento de frijol, que es poco demandante de nutrimentos, por la fijación de nitrógeno atmosférico, obteniendo de esta forma cosecha que con otro cultivo no se obtendría.

En el caso del cacahuate la limitante es la humedad, debido a esto sólo se siembra en temporada de lluvias. En cuanto a los nutrimentos del suelo, por ser una leguminosa fijadora de nitrógeno la demanda no es excesiva e influye en menor medida en la extracción. En el ciclo de tonalmil (otoño/invierno), se establece frijol, que es más tolerante a la falta de humedad y en el siguiente y último ciclo se siembra maíz, aprovechando de esta manera los nutrimentos que el cacahuate y el frijol dejaron disponibles en ese espacio.

El frijol es complementario a los cultivos de cacahuate y maíz en el ciclo agrícola de temporal. En el ciclo de tonalmil, no se siembra ningún cultivo en ese espacio, pero en el nuevo ciclo de temporal se establece cacahuate, no agotando los nutrimentos de esta manera.

Los árboles en el sistema son principalmente el xikilitl, huaxi (Leucaena pulverulenta (Schltdl.) Benth.), alahuahtli (Genero Heliocarpus ), iztahuitztli, azinkuahuitl y ahuakatl (Persea americana Mill.), que aportan horcones, leña, madera para postes y alimentos.


Literatura relacionada

Casales Buenrostro, G., González Herrera, M. y Roldán Reyes, T. 2010. Caracterización del proceso de producción del cultivo de chile (Capsicum annum L.) en el municipio de Zontecomatlan de López y Fuentes, Veracruz. Departamento de Agroecología, Universidad Autónoma Chapingo. Chapingo, México. No publicado. 22 p.

Casales Buenrostro, G. 2013. Diagnóstico para el establecimiento de sistemas agroforestales en la cuenca de río Xilotla, Zontecomatlán, Veracruz. Tesis profesional. Departamento de Agroecología, Universidad Autónoma Chapingo. Chapingo, México. 145 p.

Saludos...


Para leer más:

martes, 19 de mayo de 2015

Chilpoktli yei

Siguiendo con nuestro ciclo de publicaciones en torno al cultivo del chile (Capsicum annum L.), hemos llegado a tan esperado final, para poder saber cómo obtenemos el chilpoktli (chile ahumado).

Pues bien, sin más preámbulos después de la cosecha de los frutos del chile, lo que sigue es el ahumado, esencial para poder deleitarnos de un sabor único.


Figura 13. Chile recién ahumado con leña de encino.


Ahumado

El tlawaztli (ahumado) de los frutos del chile se puede llevar a cabo en la misma parcela o en el patio de la casa del productor.

Para efectuar el ahumado se construye el kupilli (cupil o ahumador*) , en el cual, mediante el calor de la leña y el humo generado, se seca el chile, transformándose en chilpoktli (chile ahumado).

*En este caso, se describe la construcción más tradicional del cupil, sin embargo se pueden encontrar elaborados a partir de piedra, tabicón y cemento.

El cupil se construye con diversos tipos de vara, entre ellos sobresale la planta de chimalakatl (carrizo de escudo). Se utiliza para la elaboración del tlapechtli (cama o área del ahumado), ver Figura 13. Las varas de esta planta no pierden consistencia con el calor proveniente de la leña, es decir se mantienen sin reducir su tamaño por efecto de la deshidratación. La distancia entre varas del tlapechtli es de un centímetro; de esta forma de deja pasar el calor del humo, sin que los chiles se caigan al fuego.



Figura 14. Cupil improvisado; solo se puede apreciar el tlapechtli.

Para la construcción del kupiltepamitl o tlatlantzahtli (paredes del cupil), se utilizan varas de plantas como el akatl (carrizo, Arundo donax) y otlatl (otate, Otatea, un bambú). Estas varas se amarran a los palos de las cuatro esquinas y posteriormente se embarra una mezcla de lodo y paja, para cubrir bien las paredes. Esto se hace con el fin de canalizar el calor hacia el área del ahumado, haciendo de esta manera más eficiente el uso de la leña. En el amarrado de todas las varas se utiliza la corteza del alawahtli (jonote).

El secado del chile comienza paralelamente al corte de los frutos (julio-agosto). Una vez construido el cupil, se coloca en el área del ahumado una tendida de los frutos del chile, que alcanza un grosor de 40 cm. Durante tres días los frutos son deshidratados. Los primeros dos días, se voltea una vez en la tarde y en la mañana, posteriormente al tercer día se voltea de dos o tres veces dependiendo de la consistencia del chile. En el volteo se procura que los frutos que se encontraban en las orillas y en la parte superior, queden en medio del tlapechtli, para un ahumado uniforme.

La leña que se utiliza para ahumar el chile, proviene de arboles como el chalawihtli (chalahuite), akex (guazima), ezkuawitl (sangregado), pimienta, tlikolawakatl y awatl (encino, Quercus); este último es el de mayor calidad, ya que el calor desprendido de su combustión es intenso. Además quema lentamente, lo que permite que el chile no se queme y adquiere una coloración canela, ver Figura 14. Por el contrario, cuando se utiliza leña de las otras especies, la cantidad requerida es mayor en comparación con la del encino y la coloración del chile es más obscura, lo que le da un mal aspecto.

Una vez secado la tendida de chile verde, este se reduce a la mitad, es decir de 40 cm de espesor, se reduce a 20 cm de chile seco.

Las medidas del cupil varían según la extensión del chilmilli (chilar), pero en general se mantienen constantes las medidas del tlapechtli en cuanto a la altura (1 a 1.5 m) y el ancho (1 m). Esto se debe a las proporciones de las extremidades corporales de las personas, a un metro de altura aproximadamente, se puede voltear fácilmente el chile y en cuanto a la anchura, se puede alcanzar el centro con un brazo fácilmente, de los dos lados del cupil. En la comunidad de José María Pino Suarez, se reporta que a partir de 5 tercios cultivados, se necesita de dos personas para el volteo del chile, y entonces el cupil se incrementa en sus proporciones. La tendida de chile alcanza un poco más de 60 cm de altura y los días para el secado es de cinco. En este caso los cupileros o volteadores del chil, se suben en el área del ahumado para revolver los frutos del chile.


Almacenamiento

El chilwahtli (chile seco) se pone en costales generalmente de ixtle, los cuales se guardan en el tlapanko (tapanco, espacio debajo del techo), que es un lugar fresco y seco. Después se saca al sol periódicamente cada 15 días; puede durar hasta dos años almacenado. Durante el almacenamiento se pueden presentar problemas con polillas, que van picando el chile ahumado.


Comercialización

Un factor que determina el tlanamakiliztli (comercialización) del chile es la incidencia del picudo (Anthonomus eugenii) y del lochón. Si se empieza a echar a perder la producción por tal motivo, se empieza a cortar todo el chile posible, para vender en verde. En otros casos se vende en verde para obtener ingresos económicos inmediatos.

El chile verde se comercializa en los tianguiz de Zontecomatlán, Iztacahuayo, Colatlan, y Benito Juárez. Los precios varían de localidad a localidad, por la oferta y la demanda. A continuación se reportan los precios promedio de algunas comunidades, así como el promedio municipal en el cuadro 2.


Cuadro 2. Precios promedio por comunidad y municipal del chile en verde.



El chile seco se vende dentro de las mismas comunidades y en los tianguiz de Zontecomatlán, Iztacahuayo, Benito Juárez, Colatlan, Álamo, Chicontepec, Xocapa y Huayacocotla. Asimismo, la producción de chile seco es acaparado por coyotes, provenientes de Huayacocotla, Tulancingo, etc., que lo comercializan en otros mercados regionales.

El precio del chile seco varía según la época y se vende durante los meses inmediatos al ahumado. Los precios promedio por comunidad se reportan a continuación en el Cuadro 3.


Cuadro 3. Precios promedio por comunidad del chile ahumado.



También se reporta la venta de chile capón o sin semilla, el cual cuesta 20 pesos por litro, por el retiro de las semillas y venas.

Las unidades de medida utilizadas para la venta, en el caso del litro y el cuartillo se basan en volumen (un cuartillo corresponde a 5 litros), para el caso de la arroba se utiliza el peso, que corresponde a 12 kilogramos.

Las edades de los productores de chile

Para el trabajo que se reseña en las contribuciones anteriores y arriba, se hicieron 56 entrevistas individuales y dos entrevistas grupales, por lo que el número de entrevistas ascendió a 58, distribuidas en 12 comunidades de la cuenca del río Zontecomatlán, dentro del municipio del mismo nombre. El mayor número de entrevistas correspondió a las comunidades de Cuatecomaco y El Mamey con 13 entrevistas (22%) cada una. Las dos entrevistas grupales en reuniones se llevaron a cabo en las comunidades de La Candelaria y José María Pino Suarez. En el Cuadro 4 se reportan las proporciones de las edades de los productores por comunidad.


Cuadro 4. Numero de entrevistas y composición en edades por comunidad.



Se dividió las edades de los productores en dos grupos, el primero de 20 a 40 años y el segundo de 41 a 80 años. Como se puede apreciaren el Cuadro 4, el mayor número de productores se concentró en el segundo grupo con 73%, mientras que el primer grupo solo representó 27%.

Por lo anterior se vislumbra una tendencia en la disminución de los productores de chile, con una consecuente pérdida de conocimiento local acerca del cultivo. Fueron los integrantes del segundo grupo los que aportaron principalmente los vocablos que se reportan en el proceso de producción del cultivo de chile, en cuanto a nombrar los momentos importantes del cultivo de chile, así como a los objetos relacionados con éste, en términos de la lengua náhuatl.

_________________________________


Las contribuciones anteriores de la serie:


REFERENCIAS

Casales Buenrostro, G., González Herrera, M. y Roldán Reyes, T. 2010. Caracterización del proceso de producción del cultivo de chile (Capsicum annum L.) en el municipio de Zontecomatlan de López y Fuentes, Veracruz. Departamento de Agroecología, Universidad Autonoma Chapingo. Chapingo, México. No publicado. 22 p.

Cervantes Espíndola, R. 2007. Plan municipal para el desarrollo rural sustentable. Municipio de Zontecomatlán de L. y F. Estado de Veracruz. Consejo Municipal de Desarrollo Rural Sustentable de Zontecomatlán. Zontecomatlán, Veracruz, México.

Hernández Tapia, A. (coordinador). 2008. Diagnóstico del municipio de Zontecomatlán, Veracruz. Departamento de Agroecología. Universidad Autónoma Chapingo. Chapingo, Texcoco Edo. de México.

Long Solís, J. 1986. Capsicum y cultura: La historia del chilli. Fondo de Cultura Económica. México, D. F.


FIN

Para leer más:

lunes, 4 de mayo de 2015

Chilpoktli ome

Algunas veces vistosos por el arreglo y colores de los cultivos, otras veces por los paisajes quemados por el inicio de las siembras, y algunas veces más por las hierbas y arbustos que crecen sobre los restos de plantas cultivadas, los campos cultivados llaman la atención. En la Región Huaxteca Veracruzana este escenario es común en las diversas épocas del año.

En particular en las comunidades del municipio de Zontecomatlán de López y Fuentes, el mosaico de cultivos es sorprendente. Pero continuando con el cultivo de chile, en especial del llamado chilpoktli, la vista de los agroecosistemas es colorida.

Figura 9. La primera escarda.

Esto es especialmente así cuando el chilmilli* (milpa de chile) está sometido al manejo de los campesinos por arvenses, plagas y enfermedades; ademas de la fructificación y maduración. Es precisamente cuando llegamos a las labores culturales, plagas-enfermedades y cosecha del fruto.

*Chilmilli; del nawatl chilli=chile y de milli=milpa o sementera.


Labores culturales

Se dan de dos a tres tlamewalli (escardas o deshierbes) al cultivo  en todo el ciclo. Para ello se utiliza el kuakocho (huingaro), arrancando de raíz todas las hierbas y dejando solamente plantas útiles como los quelites y el zoyotl (planta rastrera que se utiliza para condimentar los frijoles).

La primera escarda se hace 20 días después del transplante. El tiempo entre cada escarda es de 20 a 30 días, dependiendo del crecimiento de las arvenses y del criterio del productor (ver Figura 9). En algunos casos se reportan hasta cuatro escardas.


Plagas y enfermedades

Las principales plagas y enfermedades del cultivo de chile se describen a continuación.

Picudo del chile (Anthonomus eugenii).- Es una de las plagas más importantes en los chilares de las comunidades del municipio de Zontecomatlán. Por muchos años ha provocado pérdidas significativas, debido a que no se maneja adecuadamente y a que el monocultivo del chile se ha extendido en la mayoría de las comunidades. La hembra de esta plaga oviposita sus huevecillos en las yemas florales, por lo que al momento de la formación de los frutos, el chilokuilli (gusano de chile o larva) se encuentra dentro. Esto pasa desapercibido para el productor. Se percata de la presencia de la plaga cuando los frutos de chile empiezan a caer de la planta aún verdes (esto sucede en mayo y junio), pues el adulto de la plaga emerge del fruto y se come parte del pedicelo, que ocasiona su rompimiento (Figura 10).

Figura 10. Frutos del chile afectados por el picudo del chile.


Nextokuilli (gallina ciega).- Philophaga spp. causa daños a las raíces de las plantas, pero el daño al cultivo es menor.

Tlalochoni (lochon).- Es una enfermedad causada por un hongo que se presenta durante el mes de junio y julio. Esta enfermedad llega a causar pérdidas totales ya que es de fácil diseminación. Los frutos parecen haber sido hervidos, se empieza a pelar; esto se debe al exceso de lluvia que cae sobre el cultivo y la falta de suficientes días soleados.

Polokochihki (enchinamiento).- El enchinamiento de las hojas puede ser causado por un virus o por deficiencia de nutrientes en el suelo. Los productores lo atribuyen a las heladas y granizos que ocurren entre enero y febrero o a la humedad relativa excesiva en el ambiente, en conjunto con la prolongación de días calurosos (junio-julio).

Los productores también reportan la presencia de la araña roja y de la mosquita blanca pero en menor proporción.


Cosecha del chile

Por lo regular el chiltlatekiztli (corte del chile), se hace durante los meses de julio a agosto. En promedio se hacen tres cortes, aunque varia de 2 a 3 cortes en condiciones no favorables y de 3 a 4 en condiciones favorables.


El primer corte de chile se hace en el mes de julio, cuando los frutos empiezan a rayarse y a tornarse de color rojo (ver Figura 11). Los tamaños de los frutos de chile son variables, pero por lo general son de porte pequeño.


Figura 11. Frutos de chile próximos a cosecharse.


En el segundo corte, los frutos alcanzan su mayor tamaño y son más uniformes en cuanto a su aspecto visual (rayado y coloración). En este corte se hace la selección de frutos para la obtención de semilla para el siguiente ciclo agrícola.

En el tercer corte los frutos empiezan a disminuir un poco su tamaño, pero son más grandes que en el primer corte. Dependiendo de las condiciones del cultivo, se puede llegar a dar un cuarto corte, con las características más o menos parecidas al primer corte.

Para la recolección de los frutos se utiliza una bolsa o un kuachikiwitl (chiquihuite) (ver Figura 12), en el cual el cortador va recogiendo los chiles, para su posterior vaciado en costales. Una vez cortado y encostalado la producción, se transporta a hombro, hasta el lugar del ahumado.


Figura 12. Recipientes para la recolección de frutos de chile.

Los rendimientos del cultivo del chile se reportan en el Cuadro 1, según las entrevistas hechas en las comunidades.


Cuadro 1. Promedios en numero de tercios, hectáreas y rendimientos por comunidad.


Como se puede notar el número de tercios promedio por comunidad, cultivados con el chile oscila de 0.75 a 2.8, presentándose los valores más altos en las comunidades de El Mamey, Acoxcontitla, Otlatzintla, Pachitla y Cruztitlan. Los valores más bajos se ubican en comunidades como Pochoco, Tenexaco y La Candelaria. En cuanto a los kilogramos obtenidos por tercio por comunidad, destaca nuevamente la comunidad de El Mamey, que obtiene el valor más alto.

La destacada posición que tiene la comunidad de El Mamey podría explicarse por el mayor número de agricultores que mantienen al chile como cultivo básico.

anterior:


continuación: